Ir de Gloria en Gloria es la manera de Dios, y sorprendernos es su sello. Si hace 4 años me hubieran preguntado ¿qué ves hacia futuro? , te respondería: una luz en las tinieblas. Si me hubieran preguntado, ¿crees que algún día recuperarás tu vida?, te hubiera respondido: no lo sé pero pelearé por ella con todo mi aliento. Si me hubieras preguntado, ¿crees que Jesús te salvará?, te respondería: no lo sé, pero si no es él nadie más podrá. Jesús y su palabra alumbraron mi caminar y me llevaron por la senda que lleva a la vida. Seguí aquella luz en el tiempo obscuro de mi vida hasta que poco a poco llegó el gozo a mi corazón. "Y así se nos hace más firme la palabra de los profetas, a la cual hacéis bien en prestar atención, como a lámpara que luce en lugar oscuro, hasta que despunte el día y se levante en vuestros corazones el lucero de la mañana.” 2 Pedro 1:19 Todo aquel que siga la luz de la palabra de Dios jamás se perderá, será salvo, recuperará su vida, e irá de Gloria en Gloria. Miro hacia atrás y veo la mano de Dios hasta en el más mínimo detalle: en mi pareja, mi familia, mi trabajo, mis sueños, y en los dones y talentos que depositó en mí. Al lado de Jesús descubrí que solamente sembrando con lágrimas, segaría una cosecha gloriosa. Si Jesús me salvó, no sería para tener una vida mediocre, sino para vivir de Gloria en Gloria. Mucha gente se desanima porque la antesala de la gloria es enfrentar temores y morir a la carne. Pero te voy a decir algo, el olor más grato para Dios es aquel en el que quemas tu carne. Y la mejor adoración que le puedes dar es la obediencia, esto implica enfrentar todo aquello que se interponga a la Gloria del Señor. Créeme hermano, vale la pena enfrentar tus temores, y quemar tu carnalidad. Te doy testimonio de que cuando le entregamos lo mejor a Dios, él ciertamente nos dará lo mejor para nuestras vidas. No estás cansado de vivir a medias, esa comodidad ha puesto un velo en ti y no te permite ver el siguiente nivel de Gloria al que has sido llamado. Hoy el Señor tu Dios, ha despertado en ti su espíritu para la batalla. Dale un round más al Señor y pelea por esa Gloria que solamente está reservada para ti. Fuiste llamado a vivir de Gloria en Gloria. Y hoy es tiempo de volverle a creer al que una vez te salvó y te hizo libre para vivir de Gloria en Gloria.